Inés Bustos Sánchez | 15/11/2023

La práctica del CHI KUNG puede introducirse en diferentes ámbitos de la intervención logopédica tales como: compensación vestibular, trastornos neurodegenerativos, alteraciones que cursan con trastornos cognitivos de atención y memoria, así como con cuadros con alta carga de ansiedad y/o estrés asociados.

No obstante, aquí sólo nos referiremos a la intervención en educación vocal -dirigida a profesionales de la voz-, y en reeducación de alteraciones de la voz. En el primer caso, unos minutos al inicio de cada sesión, facilitará la distensión muscular y un estado de calma mental, siempre recomendables para el uso de una voz exigente y/o intensiva. Nos referimos a actores, cantantes, comunicadores, docentes, teleoperadores, etc.

En el caso de las alteraciones de la voz, suele tratarse de personas que presentan un alto grado de estrés ya sea por causas personales, familiares y/o relacionadas con el contexto social y laboral. Su patrón tónico motriz-postural incide directamente en su estilo comunicativo, alterando la adecuada relación fisiológica que ha de existir entre los tres subsistemas que producen la voz: soplo-fuente y filtro vocal.

De esta manera, tanto en el uso de la voz profesional como en la reeducación de disfonías, introducir la sesión con algunos ejercicios de CHI KUNG contribuirá a:

• Regular el estado tónico-motriz de la estructura corporal, a través del movimiento.
• Armonizar el ciclo - lento y fluido - de la respiración.
• Propiciar un estado de calma mental, y focalización en el aquí y el ahora, reduciendo el estrés corporal y vocal.

Especial mención tiene el efecto de la práctica del CHI KUNG sobre el control del estrés y la ansiedad. En este sentido, la estimulación del Sistema Nervioso Parasimpático, contrarresta la hiperexitabilidad del Sistema Nervioso Simpático, ambos componentes del Sistema Nervioso Autónomo.

Pero mientras las situaciones de estrés, ansiedad y nerviosismo sobreexitan al Simpático, el Parasimpático, contrariamente, contribuye a lograr un estado de calma mental, a regular el ritmo cardíaco y respiratorio, y estimular el peristaltismo intestinal. Entre ambos ha de existir un equilibrio funcional, que vendrá determinado por las características de la persona, y de los agentes externos con los que interactúa.

Más en detalle, las fibras nerviosas parasimpáticas se ramifican por el territorio de algunos nervios craneales (nervio motor ocular común, nervio facial, nervio vago, nervio glosofaríngeo), y también en los nervios pélvicos que surgen del plexo sacro.

Para nuestro trabajo como logopedas, entre estos nervios craneales, tiene especial relevancia la activación del nervio vago, que es el nervio craneal de más largo recorrido e inervación, incluida la laringe, el plexo cardíaco, diafragma e intestinos, entre otros órganos

En el CHI KUNG está siempre presente la estructura de todo el cuerpo de manera integral, la respiración consciente, la conciencia de raíz y apoyo sobre las plantas de los pies

Con algunos ejercicios de CHI KUNG al comenzar la sesión, la respiración se hará más lenta y más consciente, aumentará la propiocepción corporal y la sensación de calma mental y bienestar.

Así mismo, se integra el eje vertical del cuerpo estructurado a partir de una columna vertebral flexible y disponible, especialmente a nivel cervical y sacrolumbar. Estas dos zonas, revisten gran importancia en la emisión de una voz saludable y “corporeizada”….

Actualmente la neurociencia aporta múltiples evidencias científicas de los efectos beneficiosos de prácticas como la del CHI KUNG, ya que también contribuye a la estimulación del nervio vago, y por tanto, a reducir el impacto del estrés y la ansiedad que conlleva, y sostener una atención focalizada en el aquí y ahora. En este sentido, la neurociencia también señala los efectos directos que se producen sobre la fisiología cerebral, propiciados por la práctica de la respiración consciente y la focalización de la mente en el momento presente.

En conjunto, estos aspectos contribuyen a que la voz surja más conectada con el cuerpo, más libre de tensión, más auténtica en su timbre, más expresiva y más personal.

De esta manera, la sesión de logopedia podrá lograr avances vocales de manera más “corporeizada”, con unos minutos iniciales de gran “conexión” corporal, mental y emocional. La sesión habrá de continuar con las actividades previstas en función de la patología vocal presente, o de las necesidades vocales de diferentes colectivos profesionales de la voz.

Inés Bustos Sánchez
Pedagoga,
Experta en el Arte de la Palabra pedagógico
Logopeda. Col. 08-2664

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